BAQ 2014 |
CATEGORÍA REHABILITACIÓN Y RECICLAJE |
PRIMER PREMIO INTERNACIONAL |
MÉXICO |
AT103 FRANCISCO PARDO + JULIO AMEZCUA |
Havre 69 se encuentra en la parte sur de Paseo de la Reforma, en la colonia Juárez, la más exclusiva de la ciudad de México durante los años del Porfiriato.
Con el siglo XX y el crecimiento de la ciudad, la colonia Juárez se vio inmersa en la gran metrópoli; sus residentes originales se trasladaron a nuevos barrios como Lomas de Chapultepec y Polanco, mientras que muchas casas fueron convertidas en áreas de negocio, dando lugar a la Zona Rosa a mediados del siglo XX. Con el paso de los años, los cambios en el uso del suelo y el terremoto de 1985 detonaron un proceso de abandono tardío, que actualmente está siendo revertido por los programas de regeneración de la avenida Reforma y el Centro Histórico de la Ciudad de México.
Hace más de 100 años, la estructura del siglo XIX en la que trabajamos alojaba a cuatro familias de clase media-alta. Nuestro proyecto fragmenta estas casas en 12 nuevas viviendas, además de oficinas y dos frentes comerciales: una panadería y un restaurante de menú fijo de bajo costo, que junto con el espacio público que los vincula, logran generar una particular mezcla de usos, dotando de vida peatonal al sitio.
Más allá del ansia por la novedad y el enfrentamiento con los gustos de una parte de la sociedad, encontramos que existen distintas respuestas a la necesidad de redensificar la ciudad.
Las propuestas de transformación adecuadas al espíritu de los tiempos venideros, nos hacen replantear aquellas edificaciones históricas que abundan en México. Havre 69 representa una oportunidad para voltear a ver lo “viejo” y recuperar el culto a lo “nuevo”, e intenta superar los condicionamientos de lo tradicional y lo convencional.
La principal innovación de Havre 69 es que revaloriza y rescata un edificio abandonado con relevancia histórica, modificando su uso y densificando la ciudad. El proyecto aprovecha, conserva y consolida un espacio arquitectónico antiguo, desarrollando nuevos espacios que satisfacen necesidades actuales, con un lenguaje contemporáneo que evita lo “falso histórico” y logra que el conjunto se integre al contexto existente.
Havre 69 crea nuevas relaciones entre la ciudad, el barrio y las antiguas casas abandonadas, al mismo tiempo que retoma el espacio urbano que ocupa, lo cual resulta en mejoras para la zona y sus habitantes. El proyecto deja entrar a la ciudad por medio de plazas angostas a los lados, abriéndose al contexto inmediato para regenerar la fracturada textura urbana del barrio.