BAQ 2020
PREMIO MUNDIAL | HÁBITAT SOCIAL Y DESARROLLO
PANAMA
AUTORES: HDA: Héctor Delmar Arquitectura, Arq. Héctor Delmar Albarrán, Arq. Guillermo Martínez Coghlan, Arq. Constanza Lara Kane, Arq. Juan Carlos Fuentes.
Ubicada a 5 kilómetros de la localidad de Pinotepa Nacional, en Oaxaca; esta propuesta surge a partir de la colaboración entre arquitectos, desarrolladores y principalmente los habitantes de la zona, como respuesta a la demanda de espacios habitables en su comunidad, que se integraran a su estilo de vida y actividades.
A partir de un análisis del sitio e intercambio de ideas, se logró un proceso de arquitectura participativa y comunitaria para diseñar las viviendas de 38 familias en una comunidad principalmente dedicada a la agricultura, donde se entrevistó a los usuarios para que representaran en un dibujo su vivienda ideal, recopilando distintos puntos de vista sobre sus necesidades y tradiciones. En base a lo anterior, se definió el punto de partida del proyecto, donde cada vivienda responde a las necesidades de cada familia, al clima de la región, su orientación y topografía.
Cada propuesta se compone de dos volúmenes con losas a dos aguas, cada uno diseñado para dividir las áreas comunes de las privadas. En su fachada, se generaron vanos reducidos en forma de celosía que se adaptan al tamaño de los bloques, permitiendo una óptima ventilación de los espacios interiores. La forma de las cubiertas hace referencia a las ideologías que los habitantes dibujaron para una vivienda, misma que eluden a las construcciones vernáculas de la región; este elemento se adapta a las características climáticas del sitio, donde la alta humedad y precipitación predominan.
Cada bloque de vivienda es separado por un patio intermedio, que se define como un espacio de transición abierto y semiprivado al mismo tiempo, ya que ahí es donde se llevan a cabo las actividades cotidianas, contando con un área techada para cocinar, un baño común y un espacio libre para la siembra de milpa o huerto, y la crianza de animales.
Los materiales utilizados se eligieron por su disponibilidad inmediata y costo accesible. Se usaron elementos cuyos sistemas constructivos y característicos les brindaran resistencia sísmica y confort térmico a las viviendas. La materialidad se compone por bloques de barro extruido para los muros, con una envolvente de cemento que se impermeabilizó con una mezcla de cal y selladores para evitar la incidencia solar y filtración de humedad. A diferencia de otros proyectos de interés social sin planeación comunitaria, estas casas se construyeron en los predios que ya son propiedad de los usuarios, insertándose en el tejido rural existente y dando sentido de pertenencia a la población.