PREMIO PANAMERICANO | EQUIPAMIENTO
Autor/es:
Dr. Víctor Márquez | Arq. Ángeles Miranda
Colaboradores:
VMA: Arq. Sara Osorio | Fotografía: Jaime Navarro | Construcción: Arq. David Cherem | Diseño Estructural: Ing. Salvador Aguilar
El Pabellón Central es un edificio que nace a partir de la necesidad de tener una estructura contenedora de la condición geográfica en la que se propone una separación estratégica del parque y los antiguos cortes de las minas y los desniveles del parque en su zona más angosta.
El edificio tiene múltiples funciones a nivel del planteamiento urbano y espacial del conjunto. La más importante es dar continuidad a los niveles que provienen del norte del parque hacia el colector de agua, respetando su carácter de andador público y azotea verde. Por otra parte, además de su función limítrofe, es un elemento de la biozanja y una frontera espacial para la plaza central. Es un edificio que a pesar de sus enormes dimensiones, procura no contar como un elemento arquitectónico, sino como uno paisajístico.
La geometría del pabellón es más compleja de lo que aparenta. Por un lado, el trazo curvo responde a las curvas de nivel y al trazo de la calle para lograr las lotificaciones que se requerían en el plan maestro, asunto que se complica con el acusado desnivel longitudinal que el terreno impone, formando un plano reglado que representa un reto constructivo importante. Dichas limitaciones obligaron a desarrollar múltiples esquemas a lo largo de dos años, hasta llegar a la conclusión que la mejor solución sería el intentar crear un “manto” lo más delgado posible apoyado en esbeltas columnas. La compleja geometría se simplificó con un plano recto que desarrolla una sola inclinación en su lado largo, pero que al encontrarse con el trazo zigzagueante en planta dan la impresión de estar alabeados.
El edificio se compone de un programa en tres niveles en 11,500m2 cubiertos. En planta baja está un estacionamiento para 280 automóviles aprovechando el cajón de cimentación. En el nivel intermedio, el edificio consiste en una planta libre en la que se confinan espacios gastronómicos en cajas de cristal transparente. Así mismo se han planeado los accesos secundarios, los servicios generales y la entrada principal la cual comunica verticalmente con un cubo transparente de circulaciones. En este nivel el edificio se abre hacia el parque con un voladizo variable que forma una larga veranda en forma de curvas encontradas. La veranda tiene como función proveer sombra y protección para las terrazas de los cafés y restaurantes. En el nivel superior, se colocó un andador y una pista que se integran al circuito del parque en dos lados. El proyecto contempla hacer de este espacio una azotea verde.
Por lo tanto, el edificio desaparece en su extremo norte al estar enterrado y desaparece en su extremo sur al estar inclinado contra la plaza del lago.
En términos de materiales el edificio es una estructura 95% de concreto aparente, en donde la cubierta se ha desmoldado con duelas transversales produciendo una potente textura que evita innecesarias decoraciones o acabados falsos. El resto del edificio se ha resuelto con puntales de acero, parteluces de aluminio, cristales de gran formato y granitos de artificiales.