BAQ 2012 |
CATEGORÍA DISEÑO ARQUITECTÓNICO |
COLOMBIA |
HORACIO GÓMEZ, CARLOS ALBERTO BRAVO |
El primer edificio de la sede principal de este colegio, fue construido como un homenaje a Ricardo Carrasquilla, pedagogo y poeta quibdoseño, en el año de 1926, centenario de su nacimiento. El diseño estuvo a cargo del ingeniero catalán Luis Llach, quien provenía de Nueva York y se estableció en la ciudad remontando el rio Atrato desde el mar Caribe.
A mediados del siglo pasado se construyó la sede Medrano, con planos de producción local, sin alcanzar la perdurabilidad del edificio de la sede principal. Esta intervención propone con un plan maestro la organización de los espacios pedagógicos desde los niños del pre-escolar hasta los mayores en educación media. Algunos edificios pueden reciclarse, otros deben ser reemplazados.
El lugar de la intervención se encuentra dentro del casco urbano de la ciudad de Quibdó, capital del departamento del Choco y una de las ciudades más importantes de la región Pacifica colombiana, a orillas del rio Atrato y cerca de grandes reservas naturales. El terreno pertenece al barrio Las Mercedes con entrada sobre la Calle 18 y encierra un área de 30.513 m2. Las aulas del colegio Carrasquilla son el primer edificio construido del plan maestro para la sede Medrano del Instituto Integrado Carrasquilla. Consta de 18 aulas, 1 laboratorio, 1 aula de sistemas y baterías de servicios. Puede albergar 800 estudiantes.
Con una fachada totalmente permeable, basada en la geometría de la hoja de plátano, se pretende conformar un espacio arquitectónico entrañable para los niños. Esto se hace por medio del control de una envolvente cuyo fin es conectar sin fragmentar el espacio con su entorno. El objetivo arquitectónico es lograr una relación estrecha entre el edificio, el medio, la cultura y la comunidad. El edificio controla la lluvia y el sol. El viento y la mirada lo atraviesan.
Nuestra aproximación trata de ser respetuosa, buscando con la observación atenta aquellos elementos que enriquezcan el edificio y lo conviertan, no solo en un referente para la comunidad, sino en un lugar que recoja las tradiciones, las reinterprete y proponga para ellas una manera distinta de verlas en su propio contexto. Los niños que van al colegio viven orgullosos de su medio ambiente, su tradición, su música y una manera especialmente fresca de vivir la vida.
Los materiales utilizados son de uso común en la ciudad: Concreto fundido en sitio para la estructura y los pisos, bloques de concreto para los muros y la cubierta en aluminio. El edificio no tiene ventanas. Los cerramientos se fabrican con un tejido de tubería y mallas expandidas galvanizadas. El agua proviene integralmente de la lluvia recogida desde cubierta para ser reutilizada en sanitarios y riego por un sistema de retorno de aguas grises. Además cuenta con planta de potabilización de agua para consumo humano ubicada en la entrada del colegio.
El viento determina la forma de las cubiertas: Los aleros se curvan para acelerarlo, llevarlo al interior y mejorar la succión de aire caliente. La ventilación cruzada se refuerza por efecto chimenea y de convección hacia los corredores internos. En respuesta al sol, las fachadas principales se abren en dirección norte-sur. Las fachadas este y oeste son cerradas.
El consumo de energía se reduce aprovechando los elementos de la naturaleza: iluminación natural, ventilación, materiales apropiados y de bajo mantenimiento son indispensables para construir en estos lugares aparentemente frágiles e improvisados que llegan a durar más de cien años.