BAQ 2010 |
CATEGORÍA DISEÑO ARQUITECTÓNICO |
CHILE |
RICARDO ABUAUAD ABUJATUM |
El primer proyecto de transformación de la sede de la Facultad que recibimos como oficina data del año 2003. Las necesidades en aumento de las tres escuelas actuales y del Magíster, hicieron necesario evaluar en el 2008 las posibilidades de extensión de la actual sede.
La normativa para el sector es restrictiva en altura pero permite una ocupación de suelo del 100%, ocupación que, de ser explotada, pondría en jaque el espacio destinado a patio y la vida universitaria que él acoge.
Así, el desafío radica en concebir la mayor superficie útil posible con el mínimo de impacto en el suelo.
A partir de esa visión, nos resultó evidente que este cuerpo debía estar elevado, fundándose en puntos estratégicamente elegidos para posibilitar vida de patio alrededor y bajo él.
El edificio se ubica entonces en el único sector del terreno que contaba con suelo natural para fundar: el patio del segundo subterráneo, antesala del auditorio en el deslinde norte. Se propone crear una estructura que situara el primer nivel del edificio nuevo elevado 10m con respecto al suelo, haciéndolo coincidir con el segundo nivel del edificio original y permitiendo, así, el acceso de luz natural a ese hall de triple altura que se crea, a través de la diferencia de un piso con respecto al nivel del patio principal.
Además de la necesidad de elevar esa base de fundación, el desafío estructural mayor consiste en que, dado que el programa solicitado era la creación de salas de gran tamaño, no resultaba posible imaginar elementos verticales continuos del piso a la cubierta que habrían fragmentado el espacio en ellas. Así, la idea de una “columna vertebral” continua fue reemplazada por una suerte de “mesa” de hormigón armado, un nuevo suelo elevado a 10 metros del piso, sobre el que a su vez se instala un edificio metálico de tres niveles.
La elección de columnas en forma de “V” para soportar esa mesa persigue el acentuar la estrategia de minimizar el impacto en el suelo. Ello sólo fue posible al compartir los esfuerzos con un sistema de hormigón armado formado por el medianero (Oriente-poniente) y 7 contrafuertes (norte –sur) que creaban la rigidez necesaria.
Ese mismo sistema de medianero/contrafuertes permitía la creación de un tragaluz a todo lo alto del edificio en el deslinde norte, con iluminación natural y ventilación cruzada con respecto a la fachada sur.