| BAQ 2014 |
| CATEGORÍA REHABILITACIÓN Y RECICLAJE |
| ARGENTINA |
| TORRES, DIEGO JOSE,RODRIGUEZ VIRGILI, MARIA AGUSTINA,AGUIRRE GARCIA, MARIA JIMENA,VENERANDA, LUCAS |
Este proyecto nace de un llamado a concurso privado para reciclar el edificio de la vieja confitería del campus e iniciar así un nuevo ciclo de vida como sede de la Biblioteca Central Universidad Católica de Salta. Por su ubicación privilegiada dentro del conjunto, el master plan de la universidad, ya preveía este cambio de destino.
El punto de partida fue el estudio y evaluación de las condiciones que presentaba el edificio, que había sufrido ya otras intervenciones para adecuarlo al crecimiento demandado por la comunidad universitaria, a fin de decidir cuáles serían las estrategias más apropiadas para la propuesta arquitectónica. Entre los aspectos evaluados estuvieron la implantación, las relaciones espaciales y volumétricas con su contexto y la realidad constructiva y funcional.
Para encarar la propuesta, se asumió una postura sustentable, en la que recuperar materiales y estructuras existentes contribuyen al ahorro energético que ayuda a minimizar “la huella” arquitectónica.
Con el asesoramiento estructural, se decidió intervenir en el primer cuerpo del edificio de la confitería. Se reemplazaron los techos que mostraban indicios de un deterioro importante y se limpió la estructura de columnas internas, consiguiendo una planta libre para aprovechar la superficie existente y habilitarla como salas de lectura. Con la nueva cubierta metálica, se optó por un cielorraso acústico suspendido sobre el área de salas de lectura, que permitió distribuir de manera uniforme los artefactos de iluminación, ocultar las instalaciones y mejorar la percepción del espacio al incrementar la altura.
El grupo de sanitarios existentes cumplían con las condiciones requeridas para el nuevo proyecto por lo que se decidió restaurarlos acondicionándolos a su nuevo destino.
Entre los dos cuerpos del edificio que componían la vieja confitería existe un desnivel que se aprovechó para sectorizar el área de depósito de libros y administración, del área pública de salas mediante la ubicación del mostrador de atención al público. Si bien la biblioteca cuenta con un sistema electrónico de control para sus libros, su implementación resultó incompatible con las costumbres de la comunidad universitaria.
El acceso a la biblioteca se resolvió ubicándolo en el eje de circulación planteado que ordena lo público y de libre acceso, de lo privado y restringido.
Con respecto al diseño de la envolvente arquitectónica se buscó crear una imagen coherente con el contexto, a su vez reconocible y sensible a las etapas constructivas y las orientaciones solares.
El lenguaje arquitectónico del campus fue definido a fines del año 60 por los arquitectos Aslán y Ezcurra quienes aprovecharon la disponibilidad de los materiales regionales para crear la identidad edilicia de la Universidad Católica de Salta. Así definieron basamentos de piedra laja color ocre, mamposterías de ladrillo visto y cubiertas inclinadas.
