CASA EN VILLA ALLENDE

El diseño para la casa de Villa Allende surge de una premisa muy concreta: optimizar y adecuar la estructura pragramática de esta vivienda suburbana para lograr que todos los espacios habitables de la misma se relacionen simbióticamente con su entorno natural.

A partir de aquí y con un terreno de silueta rectangular con su frente orientado hacia el norte, generamos el proyecto en una planta única con forma de “T “a la que asentamos en el corazón del lote, generando de esta forma 3 patios diferentes, pero comunicados entre sí.

Esta forma particular origina dos segmentos perpendiculares entre sí y claramente diferenciados en la vivienda, no sólo en su orientación respecto del aprovechamiento de la iluminación natural, sino que concretamente en sus funciones: por un lado generamos el área pública y por el otro la privada.

El segmento destinado a las actividades públicas es el que se desarrolla paralelo a la calle y ocupando casi la totalidad de ancho del lote. Generamos volumen prismático muy claro, a modo de marco de hormigón que contiene grandes paños vidriados que se van desarrollando continuos, de piso a techo. Aberturas corredizas de aluminio se deslizan por completo permitiendo que el exterior se filtre por completo hacia el interior de la vivienda, a una distancia de 14 metros respecto de la línea de edificación lo que da origen al primero de los patios anteriormente planteados: el patio público. Enteramente hacia el norte y jerarquizado por una especie autóctona de más de 30 años de antigüedad que ya existía en el lote y que fue correctamente preservada, este patio es el que recibe al usuario que ingresa a la vivienda. El programa que se desarrolla en este segmento comienza con la cocina hacia el oeste, la que se abre hacia un espacio único destinado al living y comedor a través de una barra y que remata al este con otro paño vidriado corredizo que se abre hacia un espacio semi cubierto, que con las mismas dimensiones del living comedor, hace las veces de quincho, ya que cuenta en uno de sus extremos con la parrilla. El módulo estructural de todo este segmento se repite permitiendo que los límites actuales puedan recomponerse rítmicamente sobre la longitudinal de este espacio.

Prácticamente al centro de esta parte de la casa y siguiendo el eje norte sur que comienza en la puerta de ingreso al terreno desde la calle, se ingresa al segmento privado (perpendicular al anterior) donde se asientan el área de dormitorios y dos baños. Los tres dormitorios abren sus ventanas completas hacia el este, en búsqueda de la mejor orientación, generando de la misma forma un segundo patio de carácter más reservado, al que denominamos “patio de los dormitorios”.

Sobre el lateral oeste de este segmento, generamos el pasillo de circulación que nos permite acceder a los mencionados dormitorios y que a su vez, nos ayuda a contener el calor que genera sobre esta orientación en particular, el sol de la tarde. Hacia el oeste creamos el tercer patio de la propuesta que tiene un carácter técnico ya que el mismo está destinado a recibir los coches y servir a las dependencias de la vivienda.

Generamos así arquitectura destinada a la vida cotidiana en un microclima natural, que no solo prioriza su respeto hacia e contexto natural que la recibe, sino que hace un uso concreto del mismo para justificar y jerarquizar su especialidad interior. De igual manera, la casa expresa en su morfología el dinamismo y simpleza clara y contundente de sus habitantes, ofreciéndose generosa en las posibilidades de uso de sus micro espacios tanto interiores como exteriores y optimizando al máximo posible las cualidades de una vivienda pequeña, de escasos metros cuadrados de superficie reales.

El objeto no intenta ser contextualista en su esencia formal, pero la pureza de sus formas y proporciones coexisten respetuosamente con el entorno natural que lo enmarca y brinda mejor vida a sus residentes.

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