BAQ 2012 |
CATEGORÍA DISEÑO ARQUITECTÓNICO |
ECUADOR |
MARCO JIMÉNEZ |
La casa GT, está emplazada en un terreno complicado, estrecho, mínimo, con pendiente negativa cortado al tajo en la vereda por un despiadado muro, a un nivel de -2,50, el acceso ya era un problema, mi cliente con dos niños pequeños necesitaba que su lugar sea desprendido con ellos, necesitaban un patio-jardín. La única vista hacia la ciudad y de fondo nuestra montaña centinela; el Villonaco, se muestran generosas, era imperativo aprovecharla al máximo. Con medianeras que nos invaden a ladrillo limpio, una casa lateral adosada ya construida y otra por construirse en un futuro, era necesario defenderla de dos posibles masas altas de fachada con una altura digna y de bajos recursos. Mi cliente promotor de reuniones con amigos y familiares necesitaba un lugar amplio de encuentro para los asados y la cerveza, la casa debía ser generosa en vistas ex – interiores y amenas de espacios diáfanos y de claro uso.
Esta casa; emplazada en el nivel -2,50 para áreas sociales, incluida cocina y patio-jardín al oeste con vista a la ciudad y al Villonaco, y al este, sala de máquinas, bodegas, baño social y sala de chimenea, también una entrada de servicio, ahora; en el futuro “el acceso principal al departamento de padres”.
En el nivel N+0,20 se generan garajes, accesos, estudio, y dormitorio del hijo menor hacia el este, y la sala de estar, dormitorio master y dormitorio de hijo mayor al oeste, y al centro un puente, dos vacíos; uno generoso sobre la sala social y otro sobre un jardín que separa cocina y sala de chimenea en planta de nivel -2,50. Estos vacíos conectan el uno hacia lo social y cotidiano, espacio lúdico y sereno donde el área verde y la vista determinan con claridad los ambientes, el otro hacia arriba abierto completamente hacia el oeste es un espacio “masculino” donde la barbacoa es la solitaria protagonista, todos los niveles de la casa se conectan con gradas que flotan y comunican con sutileza, con suavidad implacable ahora, en un futuro necesario, serán historia.
La altura digna ya no es un mero recurso formal, es una cortina “cultural” digamos, pues nos protege de la vistas ociosas desde la calle y nos brinda refugio, un espacio habitable, con volúmenes protagonistas de la función como relato y con mediación de la forma.
La casa al igual que los usuarios cambiará (por necesidad de más cobijo o seguridad), se volverá vieja pero también lo hará con dignidad, se cerrara el vacío sobre la sala y será otra sala del nivel N+0,20 el estudio se transformará en cocina y listo, un departamento.
La sala del nivel N- 2,50 se dividirá y dará paso a un dormitorio máster, otro departamento más. El tercer departamento será ubicado en la terraza igual que el emplazado en el nivel + 2,70 así, con mal tiempo “podrían mis hijos ocuparlos” dicen mis clientes, yo les participo que “casado casa quiere” y la respuesta es; entonces seguridad, “los arrendamos y listo”
En todo caso mi ciudad al igual que esta vivienda se transforma con cierta singularidad de recursos, con habitantes que envejecen y mueren, que viven con miedos y alegrías, que son masculinos y femeninos, en o con lugares que son comprados por necesidad y urgencia en la mayoría de casos, y que cuyos materiales son una esperanza de patrimonio, un capital, son un registro de sensaciones y hasta emociones.
La vivienda GT tiene futuro próximo, y se ha resuelto desde la necesidad y el deseo de nuestros clientes, convirtiendo al sujeto como protagonista de la mirada arquitectónica.