BAQ 2014 |
CATEGORÍA DISEÑO ARQUITECTÓNICO |
ECUADOR |
ESTEBAN JARAMILLO,CHRISTINE VAN SLUYS |
El proyecto para el Centro Cultural El Triángulo, tiene como objetivo principal brindar un nuevo espacio para fortalecer las habilidades, tanto artísticas como productivas, de los niños y jóvenes con síndrome de down y autismo, que son atendidos por la Fundación El Triángulo, con el fin de construir una vida más autónoma para las personas con discapacidad intelectual.
El edificio, con un área construida en dos plantas de 1.942,48 m2, se encuentra ubicado en el sector de Ponceano Bajo, al norte de la ciudad de Quito, en tres terrenos que fueron entregados en comodato por parte del Municipio de Quito. La financiación del proyecto se llevó acabo con el aporte del Gobierno Nacional, El Municipio de Quito y varias empresas privadas.
Para la Fundación, los dos componentes más importantes del proyecto eran un espacio de talleres de formación de talentos en artes escénicas y talleres de capacitación en materia de producción y comercialización de diferentes productos de panadería y repostería. Por ello, este nuevo centro cuenta con espacios para las artes escénicas y sala de danza, talleres productivos como: fábrica de chocolates, panadería y pastelería, servicios como: comedor y cocina industrial, oficinas administrativas, áreas verdes y un centro de hospedaje asistido, donde las personas con discapacidad pueden aprender a vivir con independencia.
Para nosotros como arquitectos, lo más importante era darle a la Fundación y a sus 130 niños y jóvenes con discapacidad intelectual, un espacio significativo de encuentro y reunión. Por ello el punto de partida fue diseñar un gran atrio de ingreso a doble altura, alrededor de un árbol preexistente en el sitio. Dicho espacio es el corazón del proyecto y está ubicado en la esquina del terreno, desde el cual se distribuyen los demás espacios funcionales. En el exterior del edifico, el atrio se jerarquiza volumétricamente a través de una doble fachada de celosía de madera que cumple también una función de protección solar.
Otros elementos arquitectónicos importantes del proyecto son: el porche de doble altura y media, que pone en relación al nuevo edificio con las instalaciones existentes de la fundación, ubicadas al otro lado de la calle; la rampa peatonal que se desarrolla desde el atrio, pasando por el porche y sale del edificio para salvar el desnivel de más de dos metros y medio para conectarse con el nivel de la calle lateral, garantizando la accesibilidad universal en toda la planta baja del proyecto; y la pérgola, que junto al comedor, permite extenderlo al exterior y conectarlo con el pequeño jardín frontal.