BAQ 2020
PREMIO MUNDIAL | HÁBITAT SOCIAL Y DESARROLLO
PANAMÁ
Autor/es: Universidad de Ciencias Aplicadas de Múnich (MUAS) I Frente por la Defensa de la Tierra I Comunidad de Santa Catarina Quiané I CAMPO ac I atarraya taller de arquitectura
Colaboradores:MUAS: K. Baron, K. Bauer, A.M. Braun, R. Caizergues, M. Chiriboga, E. Eichinger, M. Felber, M. Fernandez, K. Franzl, A. Goncalves, M. Gutmann, M. Hartel, A. Hoelzel, F. Hecht, L. Holzapfel, S. Kayser, V. Kozma, M. Kurz, D. Lins, M. Mangas, A. Matulla, F. Menz, E. Neubauer, L. Ostermeier, I. Pinto, O. Petrenko, D. Rader, T. Reiner, M. Rottenwaller, P. Sauer, J. Schuldt, M. Schwarz, A. Sedlmeir, P. Streit, F. Stuffer, M. Tichy, L. Völkner, J. Weise, H. Wiesenfeld, M. Yücesan // Direción: U. Hartig, J. Jungwirth, F. Loserth (MUAS), L. Burbano, S. Oviedo (atarraya). CAMPO: C. Morales, E. Torres con D. Escutia, E. Guzman, J. Martinez, I. Ruiz, G. Torres, N. Torres. Frente + Quiané: J. Bernardino, J. Bravo, J. Calderon, M. Díaz, R. Contreras, A. Cruz, R. Cruz, A. García, A. Gijón, M. Hernandez, G. Léon, E. Lopez, M. Marcial, J. Marcial, F. Mendez,M. Perez, O. Perez, B. Lopez,Y. Salvador, J. Salvador, F. Hernandez. Universidad La Salle Oaxaca: M. Alvardo, R. Avendaño, A. Cortes, B. Gasga, J. Morales, P. Pérez, R. Quintana, I. Ramirez, N. Reyes, A. Rodriguez, S. Villacaña. Dirección: A. Villanueva, V. Díaz. Otras/os: K. Wagner, P. Ojeda
TIERRA Y VIDA COMUNALES
Durante la última década, la comunidad de Santa Catarina Quiané, en los valles centrales de Oaxaca, ha luchado por mantener la propiedad comunal de sus tierras ante diferentes amenazas. Simultáneamente, se ha visto afectada por procesos de migración y descampesinización, como muchos sectores rurales mexicanos.
En este contexto, el Frente por la Defensa de la Tierra, junto con las instancias Ejidales, Comunales y Municipales de Quiané, impulsan el Centro de Cultura y Ecología, con el apoyo de la organización CAMPO. La Universidad de Ciencias Aplicadas de Múnich fue invitada a participar en el diseño y construcción de este espacio a través de su taller académico 1:1.
El proyecto articula y consolida diferentes iniciativas comunitarias que buscan preservar y fortalecer el futuro de la vida comunal-campesina. La arquitectura busca materializar los entramados de cultura, producción, herencia y territorio que aquí confluyen, como un umbral en la transición entre la mancha consolidada de Quiané y sus campos de cultivo.
PROCESO
El proyecto se desarrolló en dos etapas. Las decisiones de diseño y planificación se estructuraron a través de talleres en Quiané, a los que se sumaron estudiantes y docentes por videollamada. La construcción se hizo conjuntamente entre comunidad, estudiantes y docentes, integrando el taller 1:1 con el tequio, forma tradicional de producción comunal.
ETAPAS
I. Un plan masa estructuró los elementos que la comunidad consideraba estratégicos. Después, sus componentes prioritarios fueron desarrollados: un aula para capacitaciones y un volumen de sanitarios. II. Se agregan un aula abierta para asambleas y ensayos de música y danza, junto con la cocina comunitaria.
ESQUEMA GENERAL
El Centro de Cultura y Ecología ocupa un predio comunal, en la transición entre la mancha consolidada de Quiané y sus campos de cultivo. Sigue el patrón de asentamiento quianeteco: consolida el perímetro del predio, liberando una explanada central. Un corredor reúne los diferentes volúmenes y genera un umbral entre dos zonas exteriores: una asociada a las actividades cívicas y otra al trabajo del campo, hacia los cultivos.
Aulas y cocina comunitaria enmarcan la explanada principal. Los sanitarios, equipados con un sistema de biodigestor, enfrentan la zona de actividades agrícolas.
LO PRÁCTICO Y LO SIMBÓLICO
El Centro es una manifestación potente de la voluntad quianeteca de mantener su tierra y robustecer su vida comunal-campesina. Tanto a nivel práctico como simbólico, permite concentrar y visibilizar diferentes esfuerzos comunitarios por fortalecer los entramados culturales, territoriales y productivos quianetecos: danza, cocina, asambleas comunitarias, producción agroecológica.
El proceso incorpora saberes y sistemas locales de construcción con materiales naturales. El adobe es producido por el maestro designado por la comunidad. El aula abierta se recubre con una versión adaptada del bahareque, y la cocina retoma las tradicionales cocinas de carrizo en su celosía. Un sistema de estufa ahorradora permite mantener las formas tradicionales de cocción, pero evita los problemas de salud que el humo genera. Las estructuras portantes, con estrategias de sismo-resistencia deliberadamente legibles, son de pino oaxaqueño.
El Centro resulta de acciones comunales, materializa sus valores, y facilita acciones futuras.
