BAQ 2020
PREMIO PANAMERICANO | EQUIPAMIENTO
ECUADOR
Autor: Universidad del Azuay, Arq. Pedro Samaniego Alvarado
Auspiciante: Rector de la Universidad del Azuay, Ing. Francisco Salgado A.
Departamento de planeamiento: Arq. Fernando Córdova L., Arq. Leonardo Bustos C. Ing. Arq. Luis Barrera P.
Personal técnico: Arq. Nicolás Estrella G., Arq. Sebastián Larriva N.
Construcción: Arq. Jair Castillo, Arq. Carlos Juca.
Fiscalización: Ing. José Vásquez
Descripción del proyecto:
DisLab de la Facultad de Diseño, Arquitectura y Arte de la Universidad del Azuay
El proyecto parte de la necesidad de renovar los antiguos laboratorios de carpintería, cerámica y joyería, y se enmarca dentro del plan integral de renovación y mejoras del campus central de la Universidad del Azuay.
En este espacio funcionaban los laboratorios de carpintería, joyería, cerámica, dos aulas con capacidad para 25 estudiantes y un salón de danza y teatro, dadas las condiciones del edificio se decidió reciclar la estructura existente y renovar los espacios de talleres.
Plaza de acceso
El espacio de transición entre el nuevo aulario, es un espacio que ronda los 180 m², y aunque no es generoso, se decidió dotarlo de calidad y renovarlo junto con los laboratorios, trabajando en los aspectos de tratamientos de piso, incorporación de áreas verdes, iluminación y la incorporación de un jardín vertical que sirve de telón de fondo del espacio abierto. Este espacio sirve tanto como espacio de conexión entre la batería de servicios higiénicos del aulario, como espacio de iluminación y ventilación para los talleres.
El nuevo DisLab
Las obras de renovación de los laboratorios contemplaron la reutilización del 60% de la estructura existente en los antiguos laboratorios, lo que significó una optimización económica, pero por otro lado la tarea de respetar la ubicación de cimentaciones y principalmente pilares y muros; además del trabajo arquitectónico dicha renovación contemplo la renovación de maquinaria, equipos e instalaciones para los tres talleres, además de la incorporación de una segunda planta donde funcionarían el nuevo laboratorio de diseño gráfico y la zona administrativa de los talleres.
La eliminación de las dos aulas existentes permitió la incorporación de un teatrino con capacidad para 50 personas, espacio necesario para sustentaciones de tesis, charlas y sesiones; como resultado final, en su estructura básica se tiene un volumen simple que se muestra con su fachada de ladrillo hacia el parqueadero, y el fibrocemento y la madera que armoniza con los materiales utilizados en el aulario. El primer nivel está dedicado a los talleres de carpintería, cerámica y joyerías con un espacio central a doble altura que permite además la ventilación cruzada continua a través de unos paños perforados de aparejo de ladrillo, separado de los laboratorios por un muro que aísla el ruido tenemos el teatrino, y en la planta superior la oficina de administración y el nuevo laboratorio de Diseño gráfico, adicionalmente se resolvió una zona de bodegas para almacenamiento de maquinaria, repuestos y materiales.
Estructuralmente se aprovecharon cimentaciones y columnas existentes, así como piezas metálicas que fueron reutilizadas para la conformación de las tabiquerías de fibrocemento, y se requirió conformar dos muros de hormigón armado que sirven además como estructuras de contención por la topografía del lote; materialmente, la intención es devolver el rol protagónico que ha tenido el ladrillo dentro del campus de la Universidad del Azuay.
Materiales predominantes: Acero, ladrillo, Adocreto, fibrocemento y vidrio