BAQ 2010 |
CATEGORÍA DISEÑO ARQUITECTÓNICO |
BRASIL |
FORTE, GIMENEZ&MARCONDES FERRAZ ARQUITECTOS |
El programa solicitado por el cliente fue un espacio comercial para un salón de peluqueros, uno más de una red de seis tiendas ya establecidas en São Paulo. Más que sólo un edificio en sí, este salón debería estar alineado al lenguaje estético desarrollado por la propia FGMF para el Edificio Kaze de Mooca, en 2004, que se convirtió en símbolo y estándar para toda la red.
El edificio Kaze unidad Paulista fue entonces implantado en un terreno estrecho y pequeño,
en ambos lados. Por las dimensiones exiguas, por los cuatro pavimentos del edificio y por la necesidad de iluminación natural, la fachada, formada por placas de vidrio en diferentes planos y el atrio ganaron gran importancia. La fachada es el elemento que da el carácter contemporáneo del edificio, es un gran elemento que se transforma en una potente linterna para la ciudad después del atardecer. El atrio del centro del edificio, que recorre todos los suelos tiene como elemento de principal destaque un gran panel de ladrillo hidráulico, que fue proyectado por el artista plástico Fábio Flaks, que se ha convertido en el punto focal de los que están cortando sus cabellos.
Los espacios se organizan de forma simple en cuatro pavimentos, articulados por una escalera metálica en la parte frontal. En el nivel inferior quedan recepción y cambiadores. En el segundo y en el tercer piso, se quedan dispuestas las áreas de corte, lavado, tintes, depilación, baños y
copa. El último piso del edificio alberga la administración.
La piel de vidrio, además de ser el principal medio para la entrada de luz natural, es parte de un ingenioso dispositivo de ventilación controlada y control pasivo de temperatura. Las partes del panel de cristal se abren posibilitando la entrada del aire, que circula por todo este ambiente calentado antes de ser aspirado por extractores en el último piso.
El lote de dimensiones exiguas posibilitó la creación de un edificio totalmente conectado a la malla urbana y pegado en ambas divisas, pero que al mismo tiempo expresa de forma positiva su individualidad en el constante contraste con los edificios circundantes, que califica el barrio en que está insertado.