BAQ2018 |
CATEGORÍA DISEÑO ARQUITECTÓNICO |
BRASIL |
Autores: Marcelo Ferraz, Brasil arquitetura. |
Para la construcción del museo, el Gobierno del Estado de Pernambuco destinó uno de los almacenes del antiguo Puerto de Recife y también una gran área libre a su lado. Este conjunto, está situado al borde del mar en la isla donde nació la ciudad de Recife, el Marco Cero.
En consonancia con la propuesta urbanística del Municipio de mantener los antiguos galpones del puerto dándoles nuevas funciones, el proyecto fue desarrollado con el aprovechamiento de uno de ellos (2500m2) y con la creación de un nuevo edificio (5000m2) conectado al galpón, reforzando la estructura longitudinal de las construcciones del antiguo puerto.
Por la importancia de su ubicación, el conjunto del museo crea un nuevo marco urbano en el paisaje de Recife, además de funcionar como agente de recalificación urbanística del centro histórico, reforzando los lazos de la ciudad con sus aguas-canales, ríos y mar. Y, en este caso específico del museo, trae el vasto mundo del Sertão Nordestino al borde del mar de la metrópoli: su paisaje, clima, biodiversidad, ocupación humana, tradiciones, artes, creencias, migraciones y su potente música.
Además de prestar un justo tributo a uno de los mayores íconos de la cultura brasileña (Luiz Gonzaga). Este proyecto presenta el universo del sertão en sus múltiples vertientes formadoras de un modo de ser brasileño. La fusión entre arquitectura y museografía crea una unidad a partir del tema: Sertão.
El concreto pigmentado amarillo ocre, representa el color cálido del suelo del agreste. Con una estructura sofisticada de concreto postensado, proyectamos un gran vano de unos 65 metros de luz, creando una gran plaza cubierta, un verdadero balcón urbano – abrigo del fuerte sol y de las lluvias. El más simbólico elemento de la arquitectura es el Cobogó gigante, creado especialmente para el proyecto para suavizar la relación de los espacios externos e internos. Este elemento, ejecutado en concreto geopolimérico, funciona como una gran renta blanca sobre el concreto estructural amarillo y acabó siendo adoptado como logomarca del museo. El museo ha sido un éxito por su propuesta arquitectónica y museográfica de conjugar alta tecnología constructiva y expositiva, objetos variados investigados con rigor antropológico, obras de arte en diferentes soportes, documentos, películas y fotografías.
Al presentar la vida sertaneja en un moderno equipamiento a la orilla del mar de la metrópolis pernambucana, el museo busca abrir los ojos de todos los brasileños al universo fantástico, al mismo tiempo rico y pobre, trágico y festivo, violento y poético de gran parte de la población que habita esta vastedad territorial llamada Sertão. Una experiencia acogedora, de carácter único, al mismo tiempo intelectual y afectivo.
Para resumir en pocas palabras lo que es el muelle del Sertão, podemos decir que es el encuentro de la técnica con la poética, del hi-tech con el low-tech, del riguroso y rico contenido con la posibilidad de la libre interpretación y disfrute; en fin, lugar para el «goce estético», donde emoción, sorpresa y descubrimiento caminan lado a lado. Un lugar de gentileza urbana.