BAQ2018 |
CATEGORÍA DISEÑO ARQUITECTÓNICO |
COLOMBIA |
Autor: Robert Hoyos Giraldo. Colaboradores: Erick Murillo, Carlos Villacrés, Natalia Garzón. |
Memoria descriptiva del proyecto.
Zaragoza es un municipio localizado en la subregión del bajo cauca antioqueño, con una fuerte dependencia a la extracción aurífera, lo que posibilita convertirse en un territorio con una de las mayores diversidades étnicas y culturales en la región. Es por esto que fue seleccionado por la Gobernación de Antioquía en el año 2015 como uno de los “80 parques educativos” destinados a convertirse en espacios de encuentro cultural y aprendizaje ciudadano”, en donde se busca mediante la formación de edificios públicos de pequeño formato fortalecer y contribuir al aprendizaje de las comunidades, a través de procesos de apropiación con criterios distintos a los de los modelos educativos convencionales.
Propuesta urbana.
La propuesta parte de la necesidad que tiene el edificio de poder potenciar el sector como resultado de articular y generar nuevas tensiones, a partir de la reconfiguración de la plaza de existente, el proyecto y el paisaje colindante.
Debido a las discontinuidades que presenta el sector, la propuesta plantea una readecuación de la plaza existente para que funcione como eje distribuidor entre el Parque Educativo y el paisaje colindante. De esta forma el proyecto pretende generar un impacto urbano positivo en el sector, que además de generar un lugar de encuentro, propone un pequeño teatro como lugar de esparcimiento, que además de desplazar los volúmenes armónicamente hacia el bosque nativo, el edificio también plantea una pasarela como elemento integrador del paisaje con el contexto.
Propuesta arquitectónica.
El Parque Educativo recurre a formas puras que dividen cada uno de los espacios, buscando generar al interior del edificio espacios abiertos y cerrados de acuerdo al uso que se dispuso para cada uno de los volúmenes. Desde esta línea, se parte de una geometría bastante simple, en el cual se dispone de cuatro volúmenes desplazados entre sí y agrupados bajo un sistema en cadena donde se articulan los diferentes usos.
Además, el edificio busca establecer una relación directa con el paisaje, por medio de un juego de luz y sombra que se concibe por la doble piel tipo persiana, como también la generación de balcones orientados hacia el bosque nativo. Por otro lado, las aulas dispuestas en los dos volúmenes centrales se pueden integrar con el teatro al aire libre, y de esta forma lograr integrar las actividades lúdicas del edificio con el paisaje existente.
Desde la perspectiva bioclimática, se buscó reducir considerablemente la radiación solar proyectando un sistema de doble piel reforzado con quiebrasoles verticales, que de acuerdo a la orientación del edificio se juntan o se separan en mayor y/o menor densidad para impedir la entrada directa de radiación solar a los diferentes espacios. También se buscó que el aire fluya a diferentes estancias a través de las fachadas, permitiendo la ventilación cruzada entre los espacios, por medio de una corriente de aire constante que extraiga de manera natural el aire caliente que se produce al interior, producto de la inercia térmica propia del edificio.