BAQ 2016 |
CATEGORIA DISEÑO URBANO Y ARQUITECTURA DEL PAISAJE |
COLOMBIA |
CARLOS PUERTA, VERÓNICA ORTIZ |
La Recuperación del Parque Principal Águeda Gallardo se desarrolló en el marco del Plan Nacional de Recuperación de Centros Históricos, adelantado por el Ministerio de Cultura de Colombia. Su enfoque busca que los habitantes y gobiernos de los municipios tomen conciencia de la importancia de recuperar, conservar y disfrutar el legado urbano y arquitectónico. De ésta manera, la intervención del parque conforma la primera de dos etapas que comprende el proyecto general de “Recuperación del Espacio Público del Centro Histórico de Pamplona”.
Para consolidar a Pamplona como un centro regional, educativo, cultural y religioso, era importante generar apropiación de la comunidad por los valores patrimoniales existentes y fortalecer en la misma el significado del patrimonio material e inmaterial. Para ello se planteó como principal estrategia proyectual, reconocer y evidenciar los valores patrimoniales y edificaciones que definen el marco del parque: La Catedral, el Museo Ramírez Villamizar, la Plaza de Mercado, la Casa Águeda Gallardo y el Palacio Arzobispal y ponerlos en evidencia a partir de resaltar el espacio urbano que los antecede a manera de atrio urbano para que posibilitara la convocatoria y el encuentro ciudadano.
El proyecto plantea así su recuperación como espacio público, permitiendo que se convierta nuevamente en el elemento estructurante de la ciudad. El parque se encontraba aislado por vías vehiculares perimetrales con secciones superiores a los 13 metros y un flujo vehicular constante que dificultaba los recorridos peatonales, además de generar parqueaderos permanentes en el contorno del parque.
Como estrategia de integración el proyecto buscó generar una sola superficie continua hasta los paramentos de las edificaciones, con escalonamientos en los bordes de las estancias o circulaciones. Esta acción permitió multiplicar las zonas útiles para el encuentro convirtiendo las superficies en mobiliario, bajo la utilización de un mismo material de acabado para casi todo el proyecto, en este caso la piedra Royal Beta, que refuerza la unidad de la plaza.
El proyecto busca trabajar con la luz el concepto del «contraste» y mediante su manejo tanto de día como de noche transmitir esta sensación. El parque se define como evocador y cálido. Nuestra intención era dotar al espacio de calidez, la escogencia del material de pisos permite que en un clima frío a 2400 msnm la incidencia del sol sea vital y en la noche la generación de tonalidades de luz acentúan los tiempos de la misma. Realmente es un espacio urbano múltiple donde la incidencia de la luz y la sombra son elementos que acompañan la experiencia en el espacio.
El proyecto reconoce las actividades cotidianas y hábitos de las personas, pero su mayor herramienta es la de generar los espacios físicos a manera de estancias para que la comunidad y sus gobiernos puedan gestar actividades colectivas, de orden cultural, artístico, religioso, ocio, deportivo, social. Cuando el espacio se dignifica y se hace cívico permite al usuario sentirse parte de un contexto humano y generar una nueva memoria sobre el nuevo entorno, aparece por ende la identidad con él mismo, su codependencia y apropiación.